Brasil, La empresa Alstom soborna partidos y funcionarios, con 20 millones de dólares, para ganar contratos en el país

Un nuevo escándalo de financiación ilegal de partidos políticos y sobornos a funcionarios públicos acaba de sacudir a Brasil, en un momento en que miles de personas están saliendo a la calle, casi, diariamente pidiendo el fin de la corrupción y la impunidad.
Según recogen diferentes medios del país, la empresa francesa Alstom pagó cerca de 20 millones de dólares en propinas con el objetivo de ganar contratos que le rindieron importantes beneficios. Solo en la expansión del metro de São Paulo, que le reportó un contrato de 45 millones de dólares, gastó 6,8 millones en propinas.
Este conglomerado francés ya ha sido investigado en otros países por pagos de sobornos para obtener la concesión de importantes contratos en los sectores del transporte y la energía.
En Brasil la investigación sobre los supuestos sobornos comenzó 5 años atrás, tras una información publicada en el estadounidense Wall Street Journal, que reveló que la compañía francesa pagaba comisiones, algo que Francia permitió a las empresas hasta el año 2000, a través de entidades fantasmas en varios países.
De todos los países en los que se han apurado pagos irregulares, incluidos Zambia, Indonesia  o México entre otros, únicamente en Brasil sus actos continúan impunes.
Suiza, Estados Unidos o Italia, también multaron a la empresa y varios funcionarios fueron encarcelados por sus actividades ilícitas.
Zambia, uno de los países más pobres del mundo, situado en el puesto 119 por su PIB, se encuentra en la posición 164, en cuanto al Índice de Desarrollo Humano (IDH), consiguió que la sociedad francesa fuera suspendida de cualquier licitación pública promovida por el Banco Mundial y del pago de una multa de 9,5 millones de dólares para esa institución.
Ayer el periódico brasileño Estadão, revelo que la sociedad francesa entregó para financiación de partidos políticos brasileños, una parte de los 20 millones de dólares pagados en sobornos en el país.
Según el diario brasileño la investigación muestra, mediante informes internos de Alstom, el esquema para ganar contratos públicos en Brasil, que incluyen hasta una "tabla oficial de propinas" a pagar según cargo, entidad o contrato.
El dinero fue usado para diversos proyectos de energía envolviendo diversas empresas del país como Furnas o Eletropaulo, hasta su privatización, la empresa de energía eléctrica del estado de São Paulo, que llegó a tener cerca de 27.000 empleados.
El grupo Alstom tenía, entre1989 y 2009, 237 contratos con el gobierno de São Paulo, por un valor aproximado de R$ 10.600 millones, aproximadamente unos 4.700 millones de dólares, según el blog Limpinho&Cheiroso.
Según indica el mismo el porcentaje medio de las propinas era del 8% sobre el valor de los contratos, lo que viene a representar unos R$ 848 millones en sobornos y ayudas a la financiación ilegal de partidos políticos.
Los pagos eran efectuados para comprar licitaciones o prolongar contratos de forma irregular, muchos de ellos por períodos superiores a los 20 años.
La justicia suiza, que ha puesto al descubierto la trama, no ha citado ningún partido en concreto pero indica que la participación política siempre estaba presente. En esa época el estado de São Paulo era gobernado por el PSDB (Partido de la Social Democracia Brasileña), del ex presidente Fernando Henrique Cardoso, siendo gobernador del estado el ya fallecido Mário Covas, que fue sustituido por el actual gobernador Geraldo Alckmin, quien perdió la jefatura del gobierno paulista en 2006 para recuperarla en 2011, y estando al frente de la Secretaría de Energía de São Paulo, que comandaba a la empresa Eletropaulo, David Zylbersztajn, entonces yerno de Fernando Henrique Cardoso.
Al menos 11 funcionarios paulistas estaban envueltos en la trama de corrupción.
El pasado día 7, la revista brasileña Veja sacó a la luz que la alemana Siemens, según concluyó la justicia de Alemania, pagó 8 millones de euros en otro esquema de fraude de contratos públicos en Brasil.
Según la propia revista, en total Siemens habría pagado 1.300 millones de dólares en sobornos por todo el mundo. El caso envolvió más de 300 funcionarios públicos y 4.200 transacciones sospechosas en Argentina, Bangladesh, Brasil, China, Grecia, Hungria, Indonesia, Israel, Italia, Malasia, Nigeria, Noruega, Polonia, Rusia y Vietnam. Siemens se vio obligada a pagar una multa, en los Estados Unidos, de 800 millones de dólares y de 533,6 millones de dólares en Alemania.