Las fuerzas del ejército dispararon contra los manifestantes partidarios de Mursi. EFE |
Como era de esperar la violencia está tomando las calles de Egipto, tras el golpe de Estado que derrubó a Mohamed Mursi, el pasado miércoles, a pesar del anuncio del ejército del país, realizado esta mañana, asegurando que garantizará el derecho a las protestas pacíficas.
Según diversas fuentes, se pueden escuchar tiroteos en diversas zonas de El Cairo, entre el ejército y los partidarios de Mursi, simpatizantes de la Hermandad Musulmana.
Fuerzas de seguridad egipcias dispararon hoy contra manifestantes que protestaban en El Cairo contra el derrocamiento del presidente Mohamed Mursi y murieron al menos tres personas y decenas fueron heridas, aunque portavoces del ejército niegan que los disparos hayan partido de sus fuerzas.
Fuentes de seguridad dijeron que el hecho ocurrió cuando una multitud marchaba hacia un cuartel militar de la capital donde se cree que está retenido el islamista Mursi desde su derrocamiento.
El balance de víctimas hasta el momento es de, al menos, cinco muertos y varios heridos en la capital egipcia.
Los islamistas han salido hoy a las calles para protestar contra el golpe de Estado perpetrado el pasado miércoles por el Ejército, que depuso a Mursi y nombró al jefe del Tribunal Constitucional, Adli Mansur, presidente interino encargado de convocar y supervisar las próximas elecciones presidenciales.
Las fuentes explicaron que los partidarios de Mursi intentaron irrumpir en el edificio de la Guardia Republicana (unidad militar encargada de la escolta y protección presidencial) en el barrio cairota de Ciudad Naser, donde los soldados dieron previamente tres avisos para disuadir a los manifestantes.
Por otro lado, lejos de la capital, las fuerzas de seguridad señalaron que murió un soldado y otros dos resultaron heridos cuando un cohete fue disparado contra una estación policial en Rafiah, sobre la frontera con la Franja de Gaza. El puesto policial se encuentra cerca del cuartel general de la inteligencia militar egipcia.
Asimismo, un ataque con lanzagranadas fue perpetrado contra un puesto de control que protege el aeropuerto del El Arish, cerca de la frontera Israel.
Tras los ataques, el Ejército anunció el estado de emergencia en las provincias del Sinaí y Suez.
Las Hermanos Musulmanes convocaron a sus partidarios a manifestarse en todo el país contra el derrocamiento del presidente Mohamed Mursi.
La violencia aumentó luego de la detención del guía espiritual de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Badie, y del "número dos”, Khairat al Shater, quienes están acusados de instigar al asesinato de manifestantes que protestaban ante la sede de su organización en El Cairo.
El Ejército, la fuerza que derrocó a Mursi tras las masivas protestas populares, puso en marcha desde ayer un operativo relámpago de arrestos que descabezó a la cúpula de los Hermanos Musulmanes, el partido islámico que detentó el poder hasta el miércoles pasado.
Mientras, cientos de miles de islamistas, partidarios de Morsi, se han concentrado en Ciudad Nasr, el feudo de los Hermanos Musulmanes en El Cairo y a menos de dos kilómetros del cuartel de la Guardia Republicana. Al canto de "¡derrocar, derrocar al Gobierno militar!", miles de fieles han seguido el llamamiento realizado por la cúpula de la hermandad para convertir el día santo del Islam, el viernes, en una jornada de rechazo.
Las marchas iniciadas tras el rezo de hoy viernes en El Cairo y otras ciudades repudian el derrocamiento de Mursi por parte del Ejército. Con el denominado "viernes del rechazo", los islamistas quieren mostrar que no aceptan el golpe de Estado.
Las reacciones de algunos líderes de los Hermanos Musulmanes son diferentes respecto al camino que se debe seguir en estos momentos.
Mientras, Ahmed Fahmy, un líder de los Hermanos Musulmanes, ha pedido a los cofrades que no se enfrenten al Ejército, según recoge la propia prensa del país.
El líder de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Badie, presente en la concentración, en la plaza de Rabáa al Adawiya, en Ciudad Nasr, se ha dirigido a los manifestantes. "Nuestros pechos son más fuertes que las balas", ha dicho el líder islamista. "Estaremos en la calle hasta que saquemos a hombros a nuestro presidente". Badie ha pedido a los militares que estén al lado "del pueblo egipcio". Las primeras informaciones hablaban de que Badie estaba detenido junto al resto de la cúpula de la cofradía, sin embargo su presencia en el acto de hoy desmiente esa información.
Las Fuerzas Armadas de Egipto, por su parte, pidieron a los egipcios que dejen de lado cualquier ansia de venganza y sean tolerantes con el fin de lograr la reconciliación nacional, al tiempo que garantizaron la libertad de expresión y de reunión.
En un mensaje difundido en la página oficial del portavoz del Ejército, Ahmed Mohamed Ali, los militares alertaron del peligro de cualquier acto de sabotaje o ataque a las instalaciones públicas o privadas, antes de que los partidarios del depuesto presidente Mohamed Mursi saliesen a las calles este viernes como muestra de rechazo por el reciente golpe de estado.
Haizam Amirah Fernández, investigador del Real Instituto Elcano, cree que los Hermanos "han cavado su propia tumba". "Han impuesto una Constitución que ha dividido la sociedad y han aprobado decretos constitucionales que le otorgaban todo el poder", dijo el investigador del RIE en declaraciones al Canal 24 Horas de TVE.
La Hermandad, sin embargo, fue la fuerza más votada en las elecciones de noviembre de 2011, seguida de los salafistas (islamistas radicales). La oposición laica parece estar bastante desunida y no fue capaz de presentar un programa común, en aquellas elecciones.
Evitar que Egipto caiga en un espiral de violencia parece el nuevo reto del actual gobierno, nombrado por los militares tras el golpe de Estado.
De hecho durante la madrugada, del miércoles al jueves, tras el golpe, al menos 10 personas murieron en diferentes choques. La Hermandad y el propio Morsi han llamado a la resistencia pacífica, pero uno de los asesores del presidente, Esam Hadad, advertía en las redes sociales que los islamistas no se irían a casa sin ofrecer resistencia.
La pugna entre el Estado y, en especial, los militares egipcios y los Hermanos Musulmanes, que es tan antigua como la propia organización islamista, parece haber resurgido. Durante los primeros 20 años tras su fundación en 1928 por el maestro de escuela Hasan Al Banna en Ismaeliya, los Hermanos Musulmanes se consolidaron bajo una agenda reformista, anticolonialista y antibritánica.
El viejo fantasma de los Hermanos Musulmanes ha reaparecido para despertarles del sueño del poder. El golpe de estado del Ejército que ha desbancado al presidente Morsi, el único presidente de Egipto que ha tenido la Hermandad, ha sido un golpe duro y un capítulo más en la vieja lucha entre los islamistas y los militares. Y es que la mayor piedra en el camino de éste grupo, siempre ha sido el Ejército.
Por otra parte, ayer jueves por la mañana el nuevo Presidente tomó posesión de su cargo. No tiene constitución a la que atenerse porque el Ejército ha anulado la anterior. Ahora, las fuerzas políticas y militares deben negociar para elegir a un Ejecutivo de transición que abrirá la vía a un nuevo proceso constituyente y a elecciones parlamentarias y presidenciales, según palabras del propio ejército.
A esta hora miles de partidarios y de detractores del ex presidente Mursi se concentran en dos puntos estratégicos de la ciudad: en la plaza Rabáa al Adawiya, los primeros y en la plaza Tahrir los segundos.
Según informa la BBC, "Una serie de enfrentamientos está teniendo lugar, 21:30 hora local,
entre los simpatizantes y opositores del presidente depuesto de Egipto,
Mohamed Morsi, en la plaza Tahrir en El Cairo.
Las escaramuzas involucran también a las fuerzas militares egipcias".La misma añade que, "Según informes, se escucharon sonidos de disparos en momentos en que los dos bandos se lanzaban rocas entre sí en el puente 6 de octubre, que lleva a la plaza Tahrir.
Bajo el puente, circulaban ambulancias trasladando a los heridos".
Al menos siete personas murieron en el Cairo, según varios testigos. Las autoridades estimaron los fallecidos en todo el país en 30, 12 de ellos en Alejandría.
Cientos resultaron heridas, muchas de ellas con heridas por impacto de perdigones, y otras por la asfixia provocada por los gases empleados.
Ya entrada la noche en Egipto los enfrentamientos continúan en determinadas zonas.
Captura de la web de El País.com/Reuters-LIVE! / ap |
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Puedes dejar aquí tus opiniones e impresiones sobre una entrada concreta, sobre algún tema sobre el que te gustaría ver una nueva entrada o sobre cualquier tema del blog en general.