Mundo, Transparencia Internacional avisa: La corrupción se ha agravado en los últimos años

La organización Transparency International se presenta como una asociación civil y global, líder en la lucha contra la corrupción a nivel mundial, tanto a nivel político como corporativo (empresas).
Ésta presentó ayer en Berlín su informe "Barómetro Global de la Corrupción 2013". El mismo se basa en una encuesta realizada a 114.000 personas en 107 países y muestra que la corrupción es un fenómeno extendido. El 27 por ciento de los entrevistados ha pagado un soborno al acceder a algún tipo de servicios públicos e instituciones durante los últimos 12 meses, y esto revela que no hubo una mejora respecto de encuestas anteriores.
El Barómetro Global de la Corrupción 2013 "muestra que existe una crisis de confianza en la política y serias dudas respecto de la capacidad de las instituciones responsables de llevar a quienes delinquen ante la justicia. 
En 51 de los países que participaron en la encuesta, se considera a los partidos políticos como la institución más corrupta. Por otro, el 55 por ciento de los encuestados creen que el gobierno responde a intereses particulares".
Pero la organización avisa a los gobiernos y funcionarios públicos que, "Casi 9 de cada 10 personas encuestadas señalaron que estarían dispuestas a actuar contra la corrupción, y dos tercios de aquellos a quienes se les pidió el pago de un soborno se habían negado a hacerlo, lo que sugiere que los gobiernos, la sociedad civil y el sector empresarial deben intensificar sus esfuerzos para conseguir que las personas contribuyan a revertir la corrupción".
"Los índices de pago de sobornos a nivel mundial continúan siendo sumamente altos, pero las personas creen que tienen la capacidad de detener la corrupción y una proporción significativa está dispuesta a combatir el abuso de poder, los acuerdos clandestinos y el soborno", señaló la presidenta de Transparencia Internacional (TI), Huguette Labelle.
Uno de los datos más alarmantes del informe es que las instituciones encargadas de luchar contra la corrupción generan especial desconfianza a los ciudadanos.
Sería muy extenso entrar país por país, pero voy a intentar exponer algunos de los casos más graves por los niveles de corrupción y por la percepción de la misma por parte de los ciudadanos.
En la web de la organización puede consultarse el informe completo (en inglés).
Argentina, Bolivia, El Salvador, Ghana, Indonesia, Kyrgyzstan, Kenia, México, Nigeria, Paraguay, Rusia, Ucrania, Uganda, Zambia y Zimbabwe son los países que, según sus ciudadanos tienen la policía más corrupta. Si consideramos 1 como poco corrupto y 5 como totalmente corrupto, todos ellos superan el 4,5 como nota de los encuestados. Otros 27 países tienen coeficientes entre 4,0 y 4,5.
El Salvador, Grecia, India, Italia, Jamaica, México, Nigeria, España o Vanuatu, encabezan el ranking de la corrupción de los partidos políticos, según sus ciudadanos. Sorprende encontrar a tres países europeos entre aquellos en los que sus ciudadanos perciben un alto grado de corrupción en sus partidos, todos con coeficiente igual o mayores a 4,4. Brasil, Colombia o Chipre seguían a continuación. Así, por ejemplo, en Brasil el 81% de la población considera que los partidos políticos son corruptos o muy corruptos, y un 72% tiene el mismo concepto respecto a las cámaras legislativas.
En lo que se refiere al aparato legislativo, Parlamentos y otras Cámaras, sólo Paraguay y Liberia tienen un coeficiente igual o superior al 4,4.
En el estamento militar, únicamente en Rusia y Yemen sus ciudadanos consideran que existe un alto nivel de corrupción (4,0).
Entre las ONGs, sólo Sudán tiene un coeficiente igual o superior a 4,0, en lo referente a la percepción de corrupción en las mismas. Casi todos los países están muy por debajo de esa calificación.
Uno de los sistemas más corruptos, según los encuestados, es el aparato judicial. 36 países tiene coeficientes iguales o superiores a 4,0.
Veintisiete países catalogaron a sus administraciones públicas como muy corruptas, coeficientes iguales o superiores a 4.
Tampoco los servicios médicos y relacionados con la salud se salvan de la plaga de la corrupción en numerosos países.
Según el informe, la mayor parte de la población cree además que las medidas tomadas por sus líderes para frenar la corrupción son menos eficaces que antes del estallido de la crisis financiera en 2008: la proporción de quienes las consideran efectivas se redujo desde entonces de un 31 a un 22 por ciento.
"La corrupción sigue siendo un tema de primera importancia para los latinoamericanos", señaló a la agencia DPA el responsable del departamento de las Américas de TI, Alejandro Salas. Los partidos políticos siguen siendo la institución peor calificada por los encuestados, que le dan en promedio 4,2 puntos en una escala en la que 5 es "corrupción extrema", pero la policía (4,0) y el poder judicial (3,9) mantienen una constante caída de imagen en América.
"Esto es grave si se piensa que es la región con mayores índices de criminalidad del mundo. Que las dos principales instituciones encargadas de frenar e investigar estén plagadas de corrupción es un desastre", lamentó el experto.
En El Salvador, los partidos políticos (con un 85%) y la Policía Nacional Civil (con un 81%) aparecen como los dos primeros grupos que los salvadoreños (5 de cada 10) consideran más corruptos en el país, de acuerdo con el estudio. En ese país un 79% de los salvadoreños considera la corrupción un grave problema, según publica el periódico salvadoreño El Mundo.
Por su parte, Argentina lidera el ranking de países de Latinoamérica donde hay una mayor percepción del aumento de la corrupción en los últimos dos años, seguida de México y Venezuela.
A nivel mundial la encuesta arrojó que los partidos políticos son considerados la institución más corrupta, con una puntuación de 3,8 sobre 5.
"Los gobiernos deben considerar seriamente este repudio a la corrupción por parte de la ciudadanía y responder con medidas concretas para reforzar la transparencia y la rendición de cuentas", indicó Labelle. "Se necesita un liderazgo contundente especialmente por parte de los gobiernos del G20. En los 17 países del G20 incluidos en la encuesta, el 59 por ciento de los encuestados opinaron que su gobierno no está actuando adecuadamente para combatir la corrupción".
Para el presidente de Chile Transparente, Gonzalo Delaveau, "el ranking lo encabezan los políticos, partidos políticos y el parlamento", lo que demuestra un deterioro que va en aumento de los políticos, que son instituciones importantes para la democracia, por lo que deben hacer "un examen de conciencia" y sacar adelante una serie de normas que contribuyan a la transparencia de los políticos y partidos, publicaba la CNN Chile.
En España, donde el Partido Popular (PP) del presidente del gobierno Mariano Rajoy está envuelto en sospechas de financiación ilegal, un 66 por ciento cree que la corrupción aumentó en los últimos dos años. Los partidos políticos aparecen como la institución peor calificada del país: un 83 por ciento de los españoles los consideran "corruptos o extremadamente corruptos".
La corrupción también preocupa especialmente en los otros países más golpeados por la crisis del euro. En la escala entre 1 y 5, los italianos dan a la corrupción una nota de 4,4, los griegos de 4,6 y los españoles de 4,5.
La corrupción en el sector público de Argentina fue de 4.5 y la puntuación regional de 4.3. Ello indica que constituye un problema sumamente grave en las instituciones del sector público tanto en Argentina como en Latinoamérica, dijo Poder Ciudadano, la rama argentina de Transparency International.
El 83% de los interrogados por la ONG alemana, una referencia en la lucha contra la corrupción, aseguran que los partidos políticos son las instituciónes más corruptas, seguidos por el Congreso de los Diputados (67%), la policía, especialmente en América Latina y África, y el sector privado (43%).

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