Rumanía, Queman obras de arte robadas del Centro de Arte de Rotterdam (Kunsthal)

Cabeza de arlequín, la obra robada de Picasso

Según publica la agencia rumana Mediafax, y recoge el periódico argentino Clarín, los siete cuadros de grandes artistas (Picasso, Monet y Matisse, entre otros) que fueron robados el año pasado, en un golpe millonario por el valor de los cuadros, pero tambén a la historia del arte, al Centro de Arte de Rotterdam (Museo Kunsthal), habrían tenido el peor de los finales: la madre de uno de los presuntos ladrones declaró haberlos "quemado".
Olga, la madre del rumano Radu Dogaru, uno de los detenidos por el robo, explicó ante la fiscalía de ese país, que investiga el caso, que enterró los lienzos en el jardín de una casa abandonada, después los trasladó a un cementerio y, por último, los quemó en la chimenea de su vivienda."Tras el arresto de mi hijo en enero de 2013, tuve miedo al darme cuenta de que el hecho cometido era grave", afirmó la mujer, según informaron fuentes judiciales citadas por la agencia Mediafax.
"La lista parece extraída de un manual de historia del arte: Picasso, Gauguin, Monet, Matisse, Freud. Sin embargo, se trata de las firmas detrás de los siete cuadros que han sido sustraídos esta madrugada del Centro de Arte de Rotterdam (Kunsthal). El robo millonario aprovechó una exposición que celebra el 20º aniversario del museo y que expone por primera vez la colección particular Triton, entre cuyos cuadros se encuentran los de algunos de los pintores más conocidos del planeta", publicaba El País al día siguiente del robo.
Los cuadros que fueron robados el 16 de octubre de 2012 del museo holandés son: "Cabeza de arlequín", que Pablo Picasso pintó en 1971, "Mujer ante una ventana abierta", de Paul Gauguin (1888), "Autorretrato", de Meyer de Haan (entre 1889 y 1891), "El puente de Waterloo, Londres" y "El puente de Charing Cross, Londres", de Claude Monet (ambas de 1901), "La lectora en blanco y amarillo", de Henri Matisse (de 1919) y "Mujer con los ojos cerrados", del alemán Lucian Freud (2002). Todas las piezas juntas tendrían un valor aproximado de entre 150 y 200 millones de euros.
La fiscalía rumana presentó ayer cargos por robo contra otros dos sospechosos, uno de los cuales aún está prófugo. Además, acusa a otros cuatro de haber colaborado en el robo, ya sea en el traslado de los lienzos o en el intento de venta.
"Lo primero que hice fue encender la estufa de mi baño, después de lo cual fui al cementerio y desenterré las pinturas, y regresé a mi casa con todas ellas. Envolví todas ellas en una bolsa y las coloqué en la estufa con unos zapatos de madera y botas de goma para ayudar al fuego. Quemaron bastante rápidamente y vi que las pinturas fueron calcinadas por completo. Al día siguiente, yo personalmente limpié la estufa y para eliminar las cenizas las coloqué en una carretilla que dejé en el patio. Después pedí la ayuda de un hombre para arrojar las cenizas a un barranco", le dijo Olga Dogaru a la fiscalía, según publica la agencia Mediafax.
La fiscalía agregó que la mujer decidió quemar los cuadros tras un allanamiento realizado por los investigadores en febrero pasado, al creer que si "los lienzos nunca se encontraban, no habría pruebas y (los acusados) no serían condenados".
Ahora Dogaru puede ser condenada hasta a 20 años de cárcel, pero las obras nunca volverán a ser recuperadas.

La lectora en blanco y amarillo. Henri Matisse (1919)