Argentina, un pueblo que clama por democracia y transparencia

Perspectiva de la Plaza de Mayo, con la Casa Rosada al fondo. Web Ámbito Financiero

Esta es la imagen de Argentina ayer por la noche, "hubo más gente que en las marchas del 13S y el 8N. Miles de personas fueron a la Plaza de Mayo. Luego, una muchedumbre se concentró frente al Congreso, donde se trató más temprano la reforma judicial del kirchnerismo. Además, hubo actos en distintos puntos de Capital, el Gran Buenos Aires y el interior. Esta vez, los principales referentes de la oposición adhirieron a la protesta", publica el Clarín en su página web.

Desde la Argentina hasta Australia o desde el sur hasta el norte, pasando por Madrid, París, Roma o Tokyo, el pueblo argentino hizo oir su voz de repudia, a los intentos del Gobierno, de pasar por encima de la justicia, de coartar la libertad y la democracia en el país o de mantener impune la corrupción generalizada. La consigna de los organizadores de la protesta de ayer, llamada 18A, y convocada en repudio a las actitudes del Gobierno de Cristina Kirchner: hacer oír las cacerolas en todas partes del mundo.
En las escalinatas del Consulado argentino en Río de Janeiro, un grupo de argentinos llegó desde temprano con banderas y carteles que rezaban "¡Basta!" para expresar su rechazo al actual gobierno argentino. "El nivel de corrupción e impunidad que hay en la Argentina es inaceptable. Los que gobiernan se dicen populares y nacionales, pero están destruyendo el país y la clase media", apuntó la entrerriana Carolina López, 24, empleada hotelera que lleva sólo cuatro meses en Brasil.
Varias decenas de argentinos que residen en este balneario uruguayo de Punta del Este adhirieron a la protesta contra la ofensiva del gobierno de Cristina Fernández sobre el Poder Judicial de ese país. Como ya ha ocurrido en ocasiones anteriores, el punto de encuentro fue la Parada 16 de la Playa Mansa a la que convocados a través de redes sociales, acudieron unos 70 argentinos con algunas pancartas y haciendo sonar cacerolas.
Pero las primeras imágenes que se difundieron de la protesta por el mundo fue de Australia, donde se puede observar a un grupo de argentinos, sentados y con carteles que hacían alusión a los motivos de esta jornada.
Tras Sydney, fue el turno de Tokio, y así otros países como Francia, España o Inglaterra, con el caer de la noche, se fueron sumando a la jornada de protesta, para trasladarse las mismas, posteriormente, a la otra orilla del Atlántico en ciudades como Montevideo, Nueva York, Miami, México DF, Lima, Santiago de Chile, Asunción, Río de Janeiro, San Pablo y Bogotá, entre otras.  .
"Press freedom" y "No corruption", fueron algunos de los pedidos que se repetían en los carteles de Londres. Mientras en Madrid la cacerolas sonaban al ritmo del himno nacional argentino, y en Barcelona, se mostraban pancartas con el lema "sin justicia no hay futuro", en referencia a la reforma judicial que plantea Cristrina Kirchner y que ha comenzado a discutirse en el Senado argentino.

Los manifestantes de Milán dejaban su mensaje a aquellos que se aproximaban del grupo "Cristina miente y roba".
Ya en Argentina, para el periódico Clarín "La tercera tercera manifestación multitudinaria contra el Gobierno superó a sus predecesoras (el 13S y el 8N en 2012), con gente manifestándose en varios puntos neurálgicos porteños y de las principales ciudades del Interior". Así los centros neurálgicos de la capital del país estaban tomados por riadas de manifestantes que aparecían desde los diferentes puntos de concentración. Entre las centenas de cartelas que cubrían los trayectos, muchos hacía referencia a la propuesta de reforma del sistema judicial que permitiría que el Consejo de la Magistratura –que elige y destituye jueces– fuese un órgano electo, algo que ha sido criticado por la oposición como una "politización" de la justicia. Pero también se pudieron observar carteles sobre la inseguridad, la alta inflación y la corrupción.

La principal columna partió del barrio de Recoleta, con una bandera que pedía "Basta de muertes".

A la misma hora que en Buenos Aires, la protesta tuvo su réplica a lo largo y ancho del país. Al igual que en las otras oportunidades, hubo grandes concentraciones en las capitales provinciales, en algunas ciudades del interior rural y frente a la Quinta Presidencial de Olivos, aunque Cristina Kirchner no está en el país, ya que viajó a Perú, para desplazarse posteriormente a Venezuela. Las mayores concentraciones se registraron en Córdoba, Mendoza, Salta, Bariloche, Mar del Plata, Santa Fe o Tucumán.
La Plata, en tanto, salió a la calle para pedir que se juzgue a los responsables de las inundaciones que costaron la vida, oficialmente, a 53 personas. El intendente (alcalde) Bruera fue blanco de las críticas en las consignas gritadas por los manifestanes en esta localidad.
También fue fuerte el reclamo en el Conurbano bonaerense. En San Isidro se congregaron más de 20 mil personas. También hubo concentraciones masivas en el sur y el oeste del GBA. "Basta de impunidad" y "No a la reforma de la Justicia y de la Constitución", fueron los ejes de la protesta, informa el diario Clarín.

Como ya viene siendo habitual en estas ocasiones, las redes sociales se vieron invadidas de mensajes entre partidarios y detractores, con mensajes y puyas de alto contenido satírico.
Así, tras colocar Mauricio Macri, jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, en su cuenta de Twitter el siguiente mensaje "Ya se ve muchísima gente y banderas argentinas en las calles", la respuesta de miembros de la oposición a su gobierno no se hizo esperar, y así, desde el hastag #Votovenceacacerola, se pudo leer en instantes un mensaje de Gabriela Cerruti, miembro de la cámara legislativa de la ciudad de Buenos Aires, por la alianza Nuevo Encuentro, "Si votás bien en Ciudad de Buenos Aires, por ahí no tenés que usar la cacerola para sacar el agua de tu casa cuando llueve", en referencias a las inudanciones que sufrió la capital del Estado la semana pasada, que dejaron varias víctimas y miles de afectados.
Con mayor o menor intesidad las cacerolas resonaron, ayer, en varias ciudades y países alrededor del planeta.