Brasil, Juscelino Kubitschek, expresidente del país, fue asesinado durante la dictadura militar

El presidente brasileño Juscelino Kubitschek posa para la cámara en Brasilia en esta foto tomada en 1960. (Foto AP).

Juscelino Kubitschek fue un médico y político brasileño que desempeñó en los cargos de alcalde de Belo Horizonte (1940-1945), gobernador de Minas Gerais (1951-1955), llegando a la presidencia de la República en el período de 1956 a 1961.
Kubitschek fue víctima de "conspiración, complot y atentado político" que acabaron con su muerte el 22 de agosto de 1976, durante la dictadura militar. Ese fue el dictamen de la Comisión de la Verdad Vladimir Herzog, instaurada por el Ayuntamiento de São Paulo, para investigar los crímenes cometidos durante esa época en São Paulo, basándose en 90 indicios encontrados en la investigación.
La Comisión de la Verdad dijo ayer que el accidente automovilístico que causó la muerte del ex presidente brasileño Juscelino Kubitschek en 1976 fue una maquinación del régimen militar que gobernaba el país entonces.
Según el presidente de la comisión, Gilberto Natalini, está claro que Kubitschek fue asesinado. En ese entonces, las autoridades dijeron que el exmandatario había muerto en un accidente de coche en la carretera entre São Paulo y Rio de Janeiro, según publica The Associated Press.
Kubitschek, quien supervisó la creación de la ciudad de Brasilia, era un centrista que se oponía al golpe de Estado y esperaba volverse a postular como presidente en 1965. Fue presidente de 1956 a 1961, en una época de expansión económica para el país.
La investigación del caso comenzó en mayo de este año, cuando los concejales paulistanos iniciaron una recopilación de documentos y testimonios de figuras importantes conectadas con los hechos, como el ex-conductor de la Viação Cometa, Josias Nunes de Olivo, que, en la época, fue señalado como uno de los responsables del accidente que llevó al Opala en el que Juscelino y su conductor, Geraldo Ribeiro, viajaban a salirse de la carretera Presidente Dutra y chocar contra un camión. Nunes afirmó a la Comisión, el 1 de octubre de este año, que el coche rebasó al autobús por la derecha y siguió directo hacia el carril opuesto, sin hacer curvas. El conductor, que afirmó que dos hombres le buscaron tras el crimen para ofrecerle dinero si asumía la culpa, dijó que su vehículo no rozó el del expresidente, lo que se comprobó tras investigaciones hechas en los dos automóviles y por el testimonio de pasajeros que estaban en el autobús.
El testimonio de Ribeiro ayudó a dar cuerpo a la tesis de que el conductor del coche de Kubitschek perdió el control del automóvil después de ser alcanzado por un disparo en la cabeza. Otro conductor de un camión, Ademar Jahn, que estaba próximo al accidente, afirmó ante los concejales a finales de noviembre, que, poco antes del choque, vio a Ribeiro inclinado, con la cabeza caída entre el volante y la puerta del automóvil, indicios de que estaba inconsciente en el momento de la colisión. Luego después del crimen, la familia del ex presidente fue informada de que un automóvil Caravan marchó en parelo con el Opala en la carretera antes de que el coche se saliera de control.
Las huellas del tiro en la nunca nunca fueron registradas durante las pruebas policíales. Y nunca se hicieron las pruebas de rayos-X, que podrían haber mostrado el impacto de la bala. Los indicios se escondieron hasta hace poco tiempo, afirmaron los concejales.Según el presidente de la comisión, Gilberto Natalini el ex presidente fue "víctima de una conspiración y un crimen político"."La dictadura militar (de 1964 a 1985) fue responsable de la muerte del presidente", añadió el mismo.
Ivo Patarra, uno de los asesores de Natalini, dijo que los descubrimientos de la comisión serán enviados a la presidenta Dilma Rousseff, al Congreso, a la Corte Suprema y a la Comisión Nacional de la Verdad que investiga abusos a los derechos humanos cometidos durante la dictadura.
"En principio, el objetivo de nuestra investigación y el reporte es dejar que la verdad se sepa, para corregir la historia", dijo Patarra. "Sólo el tiempo dirá si el reporte se usa para llevar a aquellos culpables de la muerte de Kubitschek ante la justicia".
A diferencia de Argentina, Chile o Uruguay, que también tuvieron regímenes militares represivos, Brasil nunca ha castigado a los militares acusados de abusos a los derechos humanos.
En el año 2000 el entonces gobernador del estado de Río de Janeiro, Leonel Brizola, dijo que el choque en el que murió Kubitschek fue parte de la Operación Cóndor, una campaña de asesinatos políticos y torturas llevada a cabo en Sudamérica.
La dictadura brasileña se mantuvo entre 1964 y 1985, con la elección de Tancredo Neves, aunque éste nunca llegó a asumir por motivos de salud, a causa de un golpe militar que derrocó al presidente João Goulart.

El presidente brasileño Juscelino Kubitschek e imágenes del accidente en el que, supuestamente, perdió la vida.