El Vaticano, El papa Francisco se moviliza contra el abuso sexual en la iglesia

El papa Francisco anunció la creación de una comisión para luchar contra el abuso sexual de menores y el apoyo a las víctimas, según confirmó El Vaticano, a través de un panel de expertos que se dedicará a combatir el abuso sexual infantil dentro de la Iglesia Católica y para ayudar a las víctimas.
El sumo pontífice quiere que la Iglesia Católica se enfoque en el cuidado de las víctimas de los abusos, dijo este jueves el cardenal de Boston Sean Patrick O'Malley, miembro del Consejo de Ocho cardenales de todo el mundo, creado por Francisco poco tiempo después de su elección en marzo pasado, para que lo asesore en los cambios por hacer dentro de la Iglesia y del Vaticano.
El anuncio llega días después de que el Vaticano desestimara una petición de Naciones Unidas de información sobre supuestos abusos por parte de sacerdotes, monjas o monjes.

El Papa ha venido insistiendo en que manejar el asunto de los abusos sexuales es vital para la credibilidad de la Iglesia. Esta misma semana, ya había expresado su "compasión" por las víctimas.
Una de las principales asociaciones italianas de víctimas de abuso clerical ha dicho que tienen "poca confianza" en el Vaticano.
El cardenal, uno de los miembros del del consejo de asesores, explicó que la decisión fue tomada por el Papa a propuesta del consejo de cardenales que lo asesora para seguir "decisivamente con las líneas adoptadas por el papa Benedicto XVI".

El anuncio lo hizo el cardenal Sean O'Malley, Arzobispo de Boston, en el Vaticano. "Hasta ahora, se ha prestado mucha atención a la arista judicial de este asunto, pero la pastoral también es muy, muy importante. El santo padre está preocupado por eso", dijo O´Malley.

"Sentimos que tener la ventaja de una comisión de expertos que podrá estudiar el tema y hacer recomendaciones concretas al santo padre y la santa sede será muy importante", agregó.
La comisión tendrá la función, entre otras cosas, según O'Malley, de elaborar una serie de modos de comportamiento para la protección de los niños y el desarrollo de normas precisas, control penal de las personas, evaluación psiquiátrica de los que están en contacto con niños y la colaboración con las autoridades civiles para denunciar los delitos., así como sugerirá nuevas iniciativas. De todo eso, mantendrá informado al Papa.
La composición y competencias de la comisión será indicada próximamente, con más detalles que ofrecerá el propio Papa en "el documento adecuado".
El cardenal explicó algunas de las propuestas de trabajo para la comisión, como la publicación de una guía de buenas prácticas para la protección de los menores, el desarrollo de programas y protocolos para crear un entorno seguro.
Además, habló de planes para cooperar con las autoridades civiles y la colaboración con expertos investigadores, obispos y religiosos de alto perfil.
La Archidiócesis de Boston fue el centro de un escándalo de abuso infantil que implicó a sacerdotes católicos en 2002. El asunto llevó a la renuncia del arzobispo del momento.
El Comité de Derechos de los Niños de Naciones Unidas envió al Vaticano un amplio cuestionario el pasado mes de julio preguntando por información detallada sobre detalles de todos los casos de abuso sexual notificados desde 1995.
El Vaticano rechazó la petición diciendo que los casos eran responsabilidad del sistema judicial de los países en que ocurrieron los abusos. Por ese motivo el Vaticano fue criticado esta semana, dado que no quería compartir detalles de sus investigaciones internas sobre casos de abuso sexual, y algunos analistas han culpado al primer Papa latinoamericano de no solucionar el escándalo de abuso sexual que heredó al asumir como líder de los católicos.
No obstante, el próximo enero funcionarios del Vaticano van a ser interrogados sobre abuso infantil, entre otros asuntos, por el Comité de Derechos de la Infancia.
En años recientes, la Iglesia Católica ha estado enmarañada en varios escándalos de dimensiones mundiales por el abuso sexual de menores por parte de sacerdotes.
Los casos de abuso por parte de miembros del clero han obligado a la Iglesia Católica a pagar cientos de millones de dólares en compensaciones en todo el mundo, lo que ha llevado a la bancarrota a varias diócesis en Estados Unidos.
El primer síntoma de que Francisco iba a abordar con rotundidad este tipo de delitos se produjo el pasado 11 de julio cuando emitió un motu proprio (documento papal) que, entre otras medidas, definía con mayor claridad este tipo de delitos contra menores, entre ellos la pornografía infantil y el abuso de menores.
La continuación de ese cambio en el modus operandi de la Iglesia en relación con los casos de pederastia llegó con el anuncio de la creación de esta comisión, cuya composición y competencias serán especificadas por el papa Bergoglio, que en los próximos días emitirá un comunicado.
La Santa Sede tiene como objetivo crear una red mundial que permita detectar, denunciar y detener este tipo de delitos.
La actitud oficial del Vaticano no convence a la más influyente asociación de víctimas de abusos, la estadounidense Survivors Network of those Abused by Priests (SNAP), que considera insuficiente la creación de la comisión papal. "Sólo una acción fuerte y decidida puede ayudar. No más estudios, comisiones y promesas. Una institución no se puede corregir a sí misma, menos una monarquía secreta, rígida y masculina", dijo esta Asociación a través de un comunicado.