Los montenegrinos votaron en un referéndum a favor de su
independencia el día 21 de mayo de 2006. En ese momento se resquebrajaba el último reducto que restaba de la antigua Yugoslavia, y quedaba formada la actual configuración de Europa.
En 1992, la República Federal Socialista de Yugoslavia se desintegró, pero Montenegro y Serbia decidieron mantenerse unidos formando la República Federal de Yugoslavia. El embargo que sufrió Yugoslavia producto de las guerras que la enfrentaba contra Croacia y Bosnia-Herzegovina durante la primera mitad de los años 1990, afectó notablemente la economía de Montenegro, que subsistió debido al tráfico ilegal.
Sin embargo, la tensión entre serbios y montenegrinos, motivada por la desigual posición que tenían ambos grupos en la República Federal, fue aumentando con los años. En un intento de equiparar la importancia de ambos estados, en 2002 se estableció la federación de Serbia y Montenegro.
En 1992, la República Federal Socialista de Yugoslavia se desintegró, pero Montenegro y Serbia decidieron mantenerse unidos formando la República Federal de Yugoslavia. El embargo que sufrió Yugoslavia producto de las guerras que la enfrentaba contra Croacia y Bosnia-Herzegovina durante la primera mitad de los años 1990, afectó notablemente la economía de Montenegro, que subsistió debido al tráfico ilegal.
Sin embargo, la tensión entre serbios y montenegrinos, motivada por la desigual posición que tenían ambos grupos en la República Federal, fue aumentando con los años. En un intento de equiparar la importancia de ambos estados, en 2002 se estableció la federación de Serbia y Montenegro.
Pero aquel domingo, 21 de mayo, unos 484.000 ciudadanos montenegrinos estaban convocados para
acudir a las urnas, en un histórico referéndum en el que participó el
86,3% del electorado, según datos de la Comisión Electoral, para decidir el futuro del país.
Ese alto nivel de participación significó superar la primera barrera que la Unión Europea había impuesto para aceptar los resultados, que era de un 50%.
La segunda condición emanada desde la UE era que los partidarios de la independencia alcanzasen al menos un 55% de votos favorables a la misma. El resultado, de un 55,5% de votos a favor, permitió superar este mínimo y, en consecuencia, el nacimiento de Montenegro como país independiente.
Durante todo el día la tensión estuvo latente entre partidarios y contrarios a la nueva condición del estado, dado que los datos recogidos durante el día indicaban una victoria de los primeros por un estrecho margen, hasta que Milo Djukanovic, Primer Ministro de Montenegro, e impulsor del referéndum para terminar con la federación que se mantenía con Serbia, declaró la victoria de los defensores de una Montenegro independiente de Serbia.
El último rastro de Yugoslavia desaparecía aquel domingo 21 de mayo de 2006, cuando el pueblo de Montenegro, un pequeño Estado sobre el Adriático, que desde 1918 estaba unido a Serbia, votó a favor de la independencia.
Pocos días después, el 3 de junio de 2006, el Parlamento de Montenegro proclamó la independencia. Reconocido, rápidamente, por diversos estados del mundo, Serbia lo reconocería como país el 15 de junio, quedando configurado el último país, hasta el momento, de la actual división geográfica y política de Europa.
El día 28 de ese mes, se integraba en la ONU, convirtiéndose en el 192º país integrante de ese organismo y el 18 de diciembre de 2010, el Consejo Europeo decidió otorgarle a este país el estatus de "candidato oficial" para ser miembro de la Unión.
Montenegro tiene una superficie cercana a los 14.000 km² y una población, según el censo realizado en 2011, que supera por poco las 632 mil personas, según fuentes del Banco Mundial.
Desde la independencia no existe ningún conflicto étnico o religioso con sus vecinos serbios. Serbia tiene algo más de 7 millones de habitantes, y el pueblo de Montenegro, dividido en su momento respecto a la independencia, espera ahora convertirse en miembro de pleno derecho de la UE e ir mejorando su estructura productiva, centrada actualmente en el sector turístico, que recoge casi un 25% de las inversiones extranjeras, gracias al turismo que recibe el país.
Su producción industrial tras una parada importante, en el período 2009-2010, parece que vuelve a reactivarse, tras registrarse un considerable aumento el año 2011, gracias al sector minero y la producción de energía.
En el año 2009, tres años después de la separación de Serbia, las consecuencias de la independencia montenegrina estaban siendo impactantes: el PIB de Montenegro había crecido un 84%, el paro cayó 22 puntos porcentuales (del 32% al 10%) y el sueldo medio había pasado de 232 euros a 465 euros.
Su IDH (Índice de Desarrollo Humano), según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, está en 0,791, porcentaje alto, ocupando la posición 52º, sobre 186 países, habiéndose mejorado la misma en dos posiciones respecto al año 2011, hallándose, por otro lado, en la 82º posición en relación al PIB (nominal) per cápita, según informe del FMI.
La corrupción es uno de los grandes problemas con los que debe convivir el país, así como ser refugio del crimen organizado en Europa. Contras que la oposición al actual gobierno, casi eterno en el poder, busca modificar en el futuro.
¿Sufrirá nuevas modificaciones la actual divisón geográfica y política de Europa en los próximos años?. Al menos sectores de las poblaciones de Catalunya y Escocia, confían en poder cambiar la configuración actual del Continente..
La segunda condición emanada desde la UE era que los partidarios de la independencia alcanzasen al menos un 55% de votos favorables a la misma. El resultado, de un 55,5% de votos a favor, permitió superar este mínimo y, en consecuencia, el nacimiento de Montenegro como país independiente.
Durante todo el día la tensión estuvo latente entre partidarios y contrarios a la nueva condición del estado, dado que los datos recogidos durante el día indicaban una victoria de los primeros por un estrecho margen, hasta que Milo Djukanovic, Primer Ministro de Montenegro, e impulsor del referéndum para terminar con la federación que se mantenía con Serbia, declaró la victoria de los defensores de una Montenegro independiente de Serbia.
El último rastro de Yugoslavia desaparecía aquel domingo 21 de mayo de 2006, cuando el pueblo de Montenegro, un pequeño Estado sobre el Adriático, que desde 1918 estaba unido a Serbia, votó a favor de la independencia.
Pocos días después, el 3 de junio de 2006, el Parlamento de Montenegro proclamó la independencia. Reconocido, rápidamente, por diversos estados del mundo, Serbia lo reconocería como país el 15 de junio, quedando configurado el último país, hasta el momento, de la actual división geográfica y política de Europa.
El día 28 de ese mes, se integraba en la ONU, convirtiéndose en el 192º país integrante de ese organismo y el 18 de diciembre de 2010, el Consejo Europeo decidió otorgarle a este país el estatus de "candidato oficial" para ser miembro de la Unión.
Montenegro tiene una superficie cercana a los 14.000 km² y una población, según el censo realizado en 2011, que supera por poco las 632 mil personas, según fuentes del Banco Mundial.
Desde la independencia no existe ningún conflicto étnico o religioso con sus vecinos serbios. Serbia tiene algo más de 7 millones de habitantes, y el pueblo de Montenegro, dividido en su momento respecto a la independencia, espera ahora convertirse en miembro de pleno derecho de la UE e ir mejorando su estructura productiva, centrada actualmente en el sector turístico, que recoge casi un 25% de las inversiones extranjeras, gracias al turismo que recibe el país.
Su producción industrial tras una parada importante, en el período 2009-2010, parece que vuelve a reactivarse, tras registrarse un considerable aumento el año 2011, gracias al sector minero y la producción de energía.
En el año 2009, tres años después de la separación de Serbia, las consecuencias de la independencia montenegrina estaban siendo impactantes: el PIB de Montenegro había crecido un 84%, el paro cayó 22 puntos porcentuales (del 32% al 10%) y el sueldo medio había pasado de 232 euros a 465 euros.
Su IDH (Índice de Desarrollo Humano), según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, está en 0,791, porcentaje alto, ocupando la posición 52º, sobre 186 países, habiéndose mejorado la misma en dos posiciones respecto al año 2011, hallándose, por otro lado, en la 82º posición en relación al PIB (nominal) per cápita, según informe del FMI.
La corrupción es uno de los grandes problemas con los que debe convivir el país, así como ser refugio del crimen organizado en Europa. Contras que la oposición al actual gobierno, casi eterno en el poder, busca modificar en el futuro.
¿Sufrirá nuevas modificaciones la actual divisón geográfica y política de Europa en los próximos años?. Al menos sectores de las poblaciones de Catalunya y Escocia, confían en poder cambiar la configuración actual del Continente..
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