Italia, Las elecciones municipales ¿Una pérdida del capital político del M5S?

Entre el domingo y ayer lunes estaban convocados los habitantes de 563 municipios italianos, de los que 14 (como Roma, Brescia, Ancona, Pisa o Siena) son capitales de provincia, para votar por los equipos de gobierno que deberán regir los destinos de sus localidades durante los próximos cuatro años.
Cerca de 7 millones de personas deberían haber depositado su voto en las urnas correspondientes, sin embargo parece que los italianos están hastiados de sus políticos, tanto a nivel nacional como local. Al menos eso parece indicar el alto porcentaje de abstención en las elecciones. Fue llamativo el caso de Roma, donde la participación llegó sólo al 52,8%.
Las elecciones municipales en Italia, que suponen una importante prueba para el actual rumbo político del país, tan sólo un mes después de la investidura de Enricco Letta como primer ministro, registraban un escaso índice de participación.
Uno de los principales perjudicados fue el Movimiento 5 Estrellas (M5S) de Beppe Grillo, cuyos resultados estuvieron lejos de los obtenidos en las elecciones generales de febrero. El periódico italiano Corriere della Sera se refiere a los mismos en estos términos, "En febrero el triunfo casi inesperado. En mayo el colapso, quizás igualmente inesperado. Y si no exactamente un colapso, tiene todas las características de un vertiginosa caída vertical".
Todo parece indicar, aunque sea pronto para afirmarlo, que este movimiento, alternativo a los partidos políticos tradicionales, perdió el crédito que tenía, quizás motivado por su inacción en la elección del primer ministro Enrico Letta, y su falta de acción para establecer acuerdos de gobierno en estas elecciones.
Sus simpatizantes parecen no estar de acuerdo con un juego político que impidió "expulsar" a Silvio Berlusconi, y su organización, del panorama político italiano. En lugar de eso se lavó las manos, dejando la iniciativa para otros grupos, lo que permitió la entrada en el gobierno del aparato de ex primer ministro de Italia.
Si en Roma perdieron casi 15 puntos respecto a las generales de febrero, Brescia, donde ganó el candidato del PDL (Pueblo de la Libertad) de Berlusconi, y Siena, donde se esperaba un triunfo del candidato del M5S, no se quedaron atrás. En esta última el porcentaje pasó del 20 al 7,5% de los votos. Sus seguidores demuestran claramente su inconformismo con su estrategia política,  "El M5S se ha reducido a la mitad. Bravo. Felicitaciones por una estrategia de comunicación desastrosa y por desperdiciar nueve millones de votos…" es una de las críticas que se han podido escuchar después de las primeras previsiones de resultados.
En Roma, el candidato de centroizquierda, Ignazio Marino, se impuso este lunes al aspirante del centroderecha a la reelección como alcalde de Roma, Gianni Alemanno, quedando el candidato del M5S fuera de cualquier disputa por la jefatura de la ciudad en la segunda vuelta.
Siguiendo con su política de inacción, el candidato de Grillo a la alcaldía de Roma, Marcello De Vitto, quando fue preguntado por quien deberían votar sus simpatizantes en la segunda vuelta, entre el candidato de centroizquierda Marino o el actual regidor Alemanno, como hiciera Beppe Grillo, se lavó las manos.
Ambos disputarán, los próximos 9 y 10 de junio, la segunda vuelta al obtener, Ignazio Marino del Partido Democrático (PD), entre el 41 y el 43 por ciento de los votos, mientras que su rival de centroderecha, el actual jefe de gobierno de la ciudad, Gianni Alemanno del partido Pueblo de la Libertad de Silvio Berlusconi (PDL), conseguiría entre el 28 y el 30 por ciento, según la proyección elaborada por la empresa Piepoli para la cadena de televisión pública RAI.
Parece evidente que el M5S ha sufrido una pérdida de apoyos por su posición de no negociar la formación de ningún gobierno, y mantenerse en una posición crítica sin compromiso de actuación.
Sin embargo entre todas las opciones, parece que la auténtica vencedora, de estas elecciones, ha sido la abstención.
En el ámbito nacional ha votado el 62,38 % (-14, 78% que en las últimas municipales) y en Roma ha votado solo el 52% (-21%), por lo que la mitad de los electores (1,1 millones) se han quedado en sus casas. Todo un récord para la capital italiana.
Se trata de una abstención también importante para el conjunto de Italia, país en el que a los comicios municipales suele acudir entre el 70% y 80% de los electores tradicionalmente.
Parece que le brecha entre los ciudadanos y sus instituciones locales y nacionales, así como con los partidos tradicionales se agranda cada día, en medio de una turbulenta e inestable situación política, y la más grave crisis económica desde el final de la II Guerra Mundial.