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miércoles, 9 de octubre de 2013

España, Femen protesta en el Congreso contra la ley del aborto de Gallardón


Dos de las tres feministas que han reivindicado en el pleno del Congreso el derecho al aborto, este miércoles, 9 de octubre. JUAN MANUEL PRATS
Fotografía JUAN MANUEL PRATS
Tres activistas de Femen han sido detenidas esta mañana tras interrumpir el Pleno del Congreso de los Diputados durante el debate de control al Gobierno, en el momento en que intervenía Alberto Ruiz-Gallardón, ministro de Justicia. Las activistas, que mostraban su torso desnudo y proclamaban "aborto es sagrado", pasarán hoy a disposición judicial.
Cuando el ministro del Partido Popular se disponía a responder a una pregunta de la diputada de UPyD Irene Lozano, el grupo de tres mujeres, identificadas con la habitual estética del grupo feminista Femen, que en sus protestas contra el machismo las activistas muestran los pechos desnudos, ha comenzado a gritar desde la tribuna de invitados "aborto es sagrado", protestando de tal forma contra las reformas llevadas a cabo por el Gobierno de Mariano Rajoy en esta materia, e interrumpiendo el desarrollo de la sesión alrededor de las 9:30 horas hasta que, en pocos minutos, los funcionarios de la Cámara Baja las han desalojado del hemiciclo, no sin cierto peligro al estar ubicadas a cierta altura del suelo.
La organización ha reivindicado el acto a través de su cuenta de Twitter, así como en la red social Facebook.
Las mujeres, entre ellas Lara Alcázar, líder del movimiento feministas Femen en España, han sido detenidas y se espera que pasen a disposicíón judicial en las próximas horas.
Por ello mismo, el presidente de la cámara, Jesús Posada, ha reclamado desalojarlas con cuidado. Alberto Ruiz-Gallardón, por su parte, y tras reanudarse la sesión, ha reprochado que algunos diputados de la oposición aplaudieran el acto reivindicativo.
Los diputados mostraban perplejidad desde sus escaños y de hecho apenas hubo escasos aplausos aislados mientras las tres mujeres seguían gritando, a pecho descubierto, con la misma leyenda escrita en su torso desnudo.
A los funcionarios de la Cámara les costó varios minutos lograr que las mujeres abandonaran se desanclaran de la barandilla y las columnas de la tribuna de invitados, pero finalmente las desalojaron, sin que las activistas dejaran de gritar el mismo lema.
Desde la bancada del Grupo Popular se oyó gritos de "fuera de aquí", mientras algunos diputados de la izquierda aplaudían.
FotoCon su lema "Aborto es sagrado" las activistas de Femen pretendían protestar por la anunciada reforma de la legislación del aborto que el Ministerio de Justicia piensa remitir este mes al Parlamento.
El ministro de Justicia, cuando se reanudó la sesión, ha reprochado que algunos diputados de la oposición aplaudieran el acto reivindicativo.
Según ha expresado después en los pasillos del Congreso, esta protesta es "una manifestación de falta de respeto a la soberanía popular" y ha expresado su extrañeza porque se califique como "sagrado" algo como el aborto, que siempre es un drama para una mujer.
Sin embargo, la acción reivindicativa fue vista con buenos ojos por el diputado de Esquerra (ERC) Joan Tardá y por el portavoz de Izquierda Plural José Luis Centella, que en los pasillos del Congreso tachó de cínico que el Gobierno se queje de que se aplauda esta iniciativa cuando el Grupo Popular ha ovacionado "dramáticas" medidas de recorte para la población española. "No se pueden criminalizar protestas siempre que sean pacíficas y que no atenten contra nadie, como en este caso", ha dicho.
Algunas de las diputadas del PP han calificado de "repugnante", "patética" y acto de "fanatismo" la protesta llevada a cabo en el Congreso.
La que fue portavoz del PP en el debate que hubo en mayo en el Congreso sobre la reforma de la ley de aborto, la diputada segoviana Beatriz Escudero, ha definido como "un acto de fanatismo" la acción de las feministas en el Pleno del Congreso: "Mujeres desnudas gritando 'Aborto sagrado'. Sin comentarios", señala.
Para la gallega Ana Vázquez Blanco, de profesión policía y miembro de la mesa de la Comisión de Interior, resulta "repugnante" que unas mujeres protesten "con los pechos al aire" y reprocha que lo aplauda otra mujer, en alusión a una diputada de Izquierda Unida. "Patética imagen en el Congreso", resume en un mensaje publicado en su cuenta personal de Twitter, recogido por Europa Press.
En la misma red social, otro diputado del PP, José Alberto Martin Toledano, ha cargado contra IU por aplaudir la protesta de Femen: "Diputados de IU aplauden el lanzamiento de un zapato a los miembros de la cámara -en alusión a un zapato que salió despedido al intentar desalojar a las activistas de la tribuna-. Izquierda radical, una vergüenza!".
En los pasillos del Congreso, el portavoz del Grupo Popular, Alfonso Alonso, ha criticado también la protesta subrayando que "el Congreso no es un sitio para estas cosas": "El Parlamento es un sitio para debates serios", ha dicho.
Los representantes de la Izquierda Plural, por su parte, han manifestado su derecho a aplaudir reivindicaciones justas, frente a los aplausos que normalmente blinda el PP "ha decisiones que hacen daño a las personas".

El grupo Femen nace gracias a los esfuerzos de la universitaria Anna Hutsol quien lo puso en marcha en 2008 en Kiev (Ucrania) con el fin de luchar contra el patriarcado y, en concreto, contra los denominados "tres enemigos mayores": la explotación sexual, las instituciones religiosas y las dictaduras, según detallan en su página de Facebook. Dos de sus señas de identidad son realizar sus protestas a pecho descubierto y llevar en la cabeza una corona de flores.
Entre las metas que persigue el grupo, hacen alusión a denunciar y protestar frente a "todo tipo de violencia" contra la mujer; informar a la opinión publica sobre las prácticas y situaciones que amenazan al futuro, la prosperidad y los derechos de la mujer; o demandar "una verdadera igualdad de género" en todos los ámbitos de la sociedad.
En una nota, en la que la organización ha reclamado la puesta en libertad de las tres jóvenes y la retirada del proyecto de ley del aborto, Femen describe a Gallardón como "un activo miembro del Opus Dei [...] que ha decidido legislar sus falsas morales". 

Imagen de las tres activistas tras ser liberadas.

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