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| Batalla campal: así fue catalogala por diversos medios de la región la riña del clásico. Foto: Darwin Borrelli. El País de Uruguay. |
Lo que hubiera debido ser un partido de fútbol más, de una rivalidad histórica, eso es innegable, pero al fin y al cabo un partido amistoso de fútbol, previo al inicio de la competición oficial, se convirtió, gracias a los jugadores, en un bochornoso espéctaculo que acabó con varios jugadores detenidos.
Nacional y Peñarol protagonizaron un escándalo cuando sus jugadores se liaron a golpes de puño a pocos minutos del cierre del clásico uruguayo en un cuadrangular de verano. El escándalo comenzó cuando Núñez, delantero de Peñarol, cometió una violenta infracción sobre De los Santos, y Scotti, de Nacional, reaccionó airadamente. Entonces fue el principio del fin.
Cinco detenidos, un policía herido y varios jugadores citados a declarar ante la justicia fue el saldo que dejó el último clásico del fútbol uruguayo entre Nacional y Peñarol, que culminó con una enorme batalla campal entre jugadores de ambos equipos dentro del césped y fuera del estadio Centenario de Montevideo entre aficionados y las fuerzas de seguridad.
Nacional ya ganaba 1 a 0 con gol de Iván Alonso, de tiro penal, cuando el delantero mirasol Carlos Nuñez elevó su pierna demasiado arriba y la estrelló contra el pecho del defensor tricolor Andrés Scotti. Una pequeña escaramuza, empujones, insultos. Y nada más.
Pero de repente, cuando todo parecía terminar en amagues, llegó un certero golpe del jugador, de Peñarol, Fabián Estoyanoff a la mandíbula de Pablo Alvarez. Y apenas tuvo destino el derechazo, comenzó la debacle pues recibió a continuación una patada de Arismendi. Fueron varios minutos de tensión, con la mayoría de los jugadores pegando, y otros pocos separando. Un bochorno.
Después del escándalo, el árbitro sólo expulsó a cuatro jugadores: Núñez y Estoyanoff en Peñarol; y a González y García en Nacional. Luego Nacional confirmó la victoria por el penalty que Iván Alonso había convertido minutos antes del desastre.
Nueve de los diez jugadores de Nacional y Peñarol que declararon ayer en la sede de la Dirección Nacional de Inteligencia quedaron detenidos en la dependencia oficial. Hoy fueron conducidos ante la Justicia que continuó con las indagatorias sobre los incidentes ocurridos el lunes en el clásico por la copa Antel (Torneo cuadrangular amistoso).
Los citados a declarar por Nacional fueron: Santiago García, Leonardo Burián, Ignacio González, Pablo Álvarez, Darwin Torres y Diego Arismendi. En Peñarol los citados fueron Fabián Estoyanoff, Carlos Nuñez, Jorge Rodríguez y Jonathan Sandoval. Tras las declaraciones todos fueron detenidos excepto el jugador de Nacional Pablo Álvarez.
El arquero suplente de Peñarol, Washington Aguerre, quedó detenido este mediodía por los incidentes ocurridos en el clásico de verano.
Ayer, luego de la comparecencia del ministro del
Interior, Eduardo Bonomi, frente a la Comisión Permanente del Parlamento, el
subsecretario Jorge Vázquez calificó de "lamentables" los incidentes
entre futbolistas en el clásico, y afirmó que estas situaciones son un
"caldo de cultivo" para provocar la violencia en las tribunas.
"Los incidentes fueron lamentables. Por todos los
medios tratamos de que estas cosas no trasciendan a la tribuna. Estos
hechos fueron un caldo de cultivo para que se pudiera armar lío en las
tribunas o fuera del estadio", advirtió Vázquez, según informa el periódico El País de Uruguay.
"¿Qué medida tenemos que tomar? ¿Prohibir los espectáculos
deportivos? ¿Prohibimos el deporte? ¿Jugamos a puertas cerradas? Los
uruguayos queremos otra cosa, queremos estadios llenos, que la gente
festeje, que se lleven banderas, pero en un clima de paz y tranquilidad.
Todos tenemos que hacer algo, no es solo el Ministerio: son los
cuadros, los dirigentes, los jugadores, los jueces, los espectadores",
reflexionó Vázquez.
Otras voces surgieron tras el lamentable espéctaculo de la noche del lunes en Uruguay, así la
Ministra de Deportes, Liliam Kechichian sentenció, "Es un bochorno, una
vergüenza". El comentario lo amplió el subsecretario
Antonio Carámbula, integrante de la Comisión de Seguridad en el Deporte:
"Queremos que las directivas de Nacional y Peñarol apliquen sanciones
contra los responsables del bochorno que se vivió en el clásico. El
combate contra la violencia en el deporte implica un largo camino a
recorrer. Ayer retrocedimos varios pasos. El que vea esto como una pelea
e hinchando 'por los míos' no está entendiendo nada ni ayudando nada.
No. Todos igual de impresentables".
Los nueve jugadores de Nacional y Peñarol que anoche permanecieron detenidos llegaron sobre las 9:45 de esta mañana a la sede judicial donde prestaron declaración.
El caso ingresó en el Juzgado Letrado en lo Penal de 9° turno a cargo de
la jueza Blanca Rieiro y participa en la investigación la Dirección
General de Información e Inteligencia a raíz de una denuncia presentada
por el Ministerio del Interior y el de Deportes.
El artículo 323 Bis del Código Penal establece que quien en una competencia deportiva "participare de una riña o compeliere a participar en ella, la dirigiese o la propiciare, será castigado con pena de tres a 24 meses de prisión". En 2000 esto se aplicó tras una trifulca en el clásico del clausura.
Se espera que entre hoy y mañana sean liberados los mismos.El artículo 323 Bis del Código Penal establece que quien en una competencia deportiva "participare de una riña o compeliere a participar en ella, la dirigiese o la propiciare, será castigado con pena de tres a 24 meses de prisión". En 2000 esto se aplicó tras una trifulca en el clásico del clausura.
"Por norma las personas pueden ser privadas de su libertad hasta 48 horas para ser indagadas y este va a ser un proceso largo, porque tienen que declarar 10 jugadores más la cuarteta arbitral. Por lo tanto, puede llevar todo el día de hoy y el de mañana, así que pueden quedar detenidos esta noche", declaró el abogado y directivo, del club Nacional de Montevideo, Alejandro Balbi.
Respecto a los incidentes y las detenciones de los jugadores el gerente deportivo de Peñarol, Carlos Sánchez declaró, tras comentársele que los jugadores debían ser ejemplo de comportamiento, "Los jugadores no son ejemplo de nada; a los jugadores se les paga para que hagan lo que saben hacer. Ellos no son ejemplo, son jugadores de fútbol y están trabajando".
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| Imagen del enfrentamiento entre los jugadores de Peñarol y Nacional. |
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