Jorge Mario Bergoglio, nacido en Buenos Aires en 17 de diciembre de 1936, es el sucesor de Benedicto XVI y el 266 Pontífice de la Iglesia Católica, tras 5 votaciones en el cónclave reunido estos días en El Vaticano.
La presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner acusó, en 2010, en duros términos a Bergoglio por la campaña contra el matrimonio entre personas del mismo sexo, que se debatía en el Congreso en aquellos momentos, a la que comparó con los "tiempos medievales y de la Inquisición", según un artículo, publicado en el periódico de la ciudad argentina de La Plata, El Día, del 12 de julio de 2010. Tres días antes el periódico argentino El Cronista había publicado que, para el recién elegido nuevo Papa, la iniciativa para la aprobación del matrimonio gay, es "una movida del Diablo que de sancionarse puede herir gravemente a la familia".
El primer Papa hispanoamericano de la historia será conocido, oficialmente, como Francisco (ya el Vaticano ha aclarado que no se le añadirá ningún número romano al nombre).
Aunque para muchos no entraba en algunas de las quinielas iniciales, su influencia en el cónclave era conocida por todos, ya que fue uno de los grandes candidatos, tras la muerte de Juan Pablo II, en 2005, para liderar la iglesia católica, aunque finalmente cayó derrotado, en aquel cónclave, por Joseph Ratzinger. Según publica hoy el diario argentino La Nación "Todo comenzó con una historia que ya hoy es por demás conocida. Una rivalidad no buscada en medio de votaciones secretas. Fue cuando el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Mario Bergoglio, en medio de una reñida votación para elegir al nuevo papa, decidió dar un paso al costado para que el otro -Joseph Ratzinger- se convirtiese, nada menos, que en el 265° jefe de la Iglesia Católica".
La elección del primer papa hispanoamericano de la historia no deja de mostrar la influencia que tiene en la iglesia católica que casi un 45% de los fieles vivan en Latinoamérica.
Esperemos que el nuevo papa tenga la capacidad y el coraje de enfrentar los desafíos futuros, y colaborar para resolver los problemas del pasado, y que esa actitud favorezca dentro de la iglesia católica una modernización y renovación de sus estructuras, sus pensamientos y una transparencia de sus acciones (banca vaticana) y actitudes, acercando la misma a sus fieles en todo el mundo, disminuyendo la brecha existen entre la iglesia católica europea y la hispanoamericana, y recuperando el prestigio perdido, a través de una profunda limpieza de su imagen que consiga dejar para atrás los últimos escándalos (IOR, escándalos sexuales, o la filtración de documentos de la Ciudad del Vaticano) en que se ha visto envuelta.
Todos los medios argentinos colocan la noticia, de la elección de Bergoglio como nuevo papa, en portada de sus ediciones digitales. Por su parte la Presidenta de Argentina, Cristina Kirchner, con quien Francisco tuvo una relación un tanto tumultuosa anteriormente, escribió en su twitter: "Es nuestro deseo que tenga, al asumir la conducción y guía de la Iglesia, una fructífera tarea pastoral desempeñando tan grandes responsabilidades en pos de la justicia, la igualdad, la fraternidad y de la paz de la humanidad".
Pero para algunos argentinos quedan algunas nubes oscuras sobre su pasado "El recién nombrado papa Francisco ha recibido críticas por algunas de sus actitudes durante la "guerra sucia" argentina de la década de 1970", ha escrito Michael Warren para el Nuevo Herald.
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| Foto capturada de la edición digital del periódico argentino El Día |
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