Turquía, Muere Berkin Elvan, el joven de 15 años, que estaba en coma desde los disturbios del parque Gezi

Decenas de miles de personas se han congregado en Estambul, Turquía, según informa la CNN turca, para celebrar el funeral de un adolescente convertido en símbolo de las protestas contra el gobierno. Ayer martes, pocos momentos después de conocerse la noticia de la muerte del joven, se produjeron violentas manifestaciones que dejaron varias personas heridas.

Imagen del funeral, celebrado hoy miércoles, del joven Berkin Elvan. CNN.

Berkin Elvan, de 15 años, murió el martes después de haber sido golpeado en la cabeza en junio de 2013 por una lata de gas lacrimógeno lanzada por la policía. Las protestas antigubernamentales de Gezi se han cobrado su octava víctima.
Elvan llevaba nueve meses en coma y el día de los hechos había salido a comprar el pan.
La multitud coreó el nombre del menor y levantó barricadas en las calles del distrito obrero de la capital donde tuvo lugar el funeral.
Algunos de esos cánticos acusaban al primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, de ser el asesino del adolescente, una afirmación que se hace eco de la opinión de la madre de Elvan.
La muerte de Berkin Elvan, de 15 años, ocurrida el martes, desató enfrentamientos entre manifestantes y policías antidisturbios en diversas ciudades.

Imagen del funeral de Berkin. Osman Orsal/Reuters.

Este miércoles miles de personas se congregaron en los alrededores del templo donde se celebraba la ceremonia fúnebre y exigieron la renuncia del primer ministro Recep Tayyip Erdogan.
El cortejo fúnebre avanzó por varias calles de la ciudad más poblada de Turquía y fue acompañado por miles de personas, lo que ha puesto en alerta a las autoridades del país.
Ya por la mañana, la Policía dispersó con gas lacrimógeno a un grupo de amigos y familiares de Elvan reunidos ante el hospital de Estambul donde falleció el joven, y horas más tarde empezaron a registrarse protestas en numerosas ciudades turcas.
Carteles con la consigna "Soy Berkin" empezaron a proliferar en la simbólica plaza Kizilay de Ankara, donde numerosos transeúntes se sentaron en el suelo con un trozo de pan en las manos, en alusión a la muerte del joven que había salido a comprar pan cuando fue alcanzado en la cabeza por un bote de gas lanzado por la Policía.
En Ankara y Estambul, la policía recurrió al gas lacrimógeno y los cañones de agua para dispersar a los manifestantes, provocando nuevos disturbios. También utilizó el gas en la puerta del hospital de Okmeydani, donde Elvan ha permanecido durante estos meses, para sofocar una concentración espontánea de protesta.
"Los agentes no se contuvieron a la hora de utilizar gas. Han vuelto a usar la fuerza de forma desproporcionada. El gas lacrimógeno ha llegado incluso a entrar en el hospital", protestó la senadora Melda Onur, del opositor Partido Republicano Popular (CHP), presente en el lugar de los hechos. Un episodio que podría, a su vez, terminar también de forma trágica, puesto que otro hombre fue alcanzado en la cabeza por un proyectil de gas lacrimógeno mientras acudía al hospital para visitar a su mujer enferma.
El mayor sindicato de trabajadores de Turquía convocó una huelga general y manifestaciones en todo el territorio del país a raíz del fallecimiento del adolescente Berkin Elvan. A esta convocatoria se han unido numerosas universidades y colegios que se han declarado en huelga.
Numerosos estudiantes de varias universidades de Ankara, Estambul, Esmirna y otras ciudades del país declararon un boicot educativo y se manifestaron en las aulas o pasillos con la consigna "Todos somos Berkin".

Gülsüm y Sami Elvan han pasado nueve meses soñando, desde el día 16 de junio, con el despertar de su hijo Berkin, que no pudo soplar las velas de su 15º cumpleaños porque estaba en coma. El día 9 de marzo, cuando ya presentían el final de su hijo, escribieron a la prensa: "Su pequeño cuerpo resistió durante 267 días el daño causado por un proyectil de gas lacrimógeno lanzado por la Policía, igual que nuestro pueblo resiste al fascismo".
Ayer a las 7 de la mañana cuando murió pesaba 16 kilos.
"Hemos enviado a Berkin a la eternidad. Mi Berkin se ha ido, pero ahora tengo a millones de Berkin", declaró ante la multitud el padre del joven, quien se ha convertido en todo un símbolo de la resistencia contra el Gobierno islamistas de Turquía.
El principal sindicato del país, según recoge el periódico inglés The Guardian, dijo tras conocerse el fallecimiento, "Sus hijos roban millones y nuestros niños son asesinados cuando van a comprar el pan". El sindicato se refería a un escándalo de corrupción, que estalló en diciembre, en el que están envueltos familiares de Erdogan así como varios miembros de su círculo íntimo.
"No puedo decir que Alá se haya llevado a mi Berkin. Tayyip Erdogan se ha llevado a mi hijo", dijo la madre, Gülsüm Elvan, después de que su hijo falleciera en la mañana de ayer.
Berkin Elvan es el octavo fallecido en el marco de las protestas por el parque de Gezi. Fueron el estallido social que nació, a finales de mayo pasado, en respuesta a la violencia empleada por la Policía en desalojar una acampada ecologista para evitar la tala de ese parque de Estambul. El primer ministro Erdogan acusó a los manifestantes de "terroristas", "antiislámicos" y "alborotadores", ordenando el uso de la fuerza contra ellos.