Italia, El alcalde de Venecia, junto a 34 personas, detenido por corrupción

Además del alcalde, Giorgio Orsoni (en la imagen), y otros 34 detenidos hay unas 100 personas más investigadas.

La Policía financiera italiana arrestó hoy al alcalde de Venecia, Giorgio Orsoni, y a otras 34 personas bajo la acusación de corrupción relacionada con la construcción del proyecto "Moisés", el sistema de diques para frenar las habituales inundaciones en la ciudad. La obra consiste en casi 80 barreras móviles que sirven para cerrar el paso del agua a la laguna de Venecia cuando crece el mar o durante tormentas, y evitar las inundaciones que la ciudad padece todos los años. La inversión inicial, de 10.000 millones de euros, se ha quintuplicado.
El sistema "Moisés" de defensa antimareas, un proyecto del que se habla desde hace decenios y que está ya parcialmente operativo, siempre ha despertado temores por el peculiar monopolio en la adjudicación de obras, su costo exorbitante y las consecuencias para el medio ambiente en el delicado ecosistema veneciano.
El faraónico proyecto, que comenzó hace siete años y que cuenta con una financiación pública de 5.000 millones de euros, era una ocasión ideal para obtener un beneficio, según las conclusiones avanzadas por la fiscalía de Venecia, que ordenó las detenciones. La obra comenzó hace 7 años, pero ha estado minada por retrasos en el financiamiento, a causa de la crisis económica italiana.
Los investigadores policiales indagan la acusación de que 20 millones de euros (27 millones de dólares) de fondos públicos fueron girados a cuentas bancarias en el extranjero y utilizados para financiar a partidos políticos.
Más de 300 agentes de la Guardia di Finanza (la policía financiera italiana) han participado en la operación que concluyó con el arresto de 25 personas y la orden de detención domiciliar de otras 10 bajo la acusación de corrupción, malversación de fondos y lavado de dinero, así como más de 100 investigados y la confiscación de cerca de 40 millones de euros.
Entre los que recibieron la orden de detención en su domicilio se encuentra el alcalde de Venecia, del Partido Demócrata (PD) y elegido en 2010 en las filas de una coalición de centro-izquierda, los empresarios Franco Morbiolo y Roberto Meneguzzo y los concejales de la región del Veneto, Renato Chisso, y Giampiero Marchese, el concejal de Transportes e Infraestructuras de la región del Veneto, cuya capital es Venecia, Renato Chisso, así como otros empresarios y políticos. La fiscalía ha cursado también al Parlamento la petición de arresto del diputado Giancarlo Galan, expresidente de la región Veneto y dos veces ministro en los gobiernos de Silvio Berlusconi. Galan habría recibido varios millones de euros del Consorcio Venecia Nueva, las empresas constructoras del proyecto Moisés, desde 2005 a 2012.
El general de la Guardia di Finanza que ha dirigido la operación, Bruno Buratto, explicó que en estos años se han localizado 25 millones de euros en fondos ocultos en Suiza y San Marino y que han podido ser vinculados al consorcio Nueva Venecia.
Estos fondos se creaban falseando facturas de operaciones o asesorías inexistentes y servían para alimentar la corrupción de políticos y funcionarios para recibir favores, explicó Buratto.
El nuevo caso de corrupción se produce solo unas semanas después de que las obras para la Expo de Milán se viesen también salpicadas por las malas prácticas que, como ya advertía recientemente Antonio Iovine, uno de los exjefes de la Camorra que ha decidido colaborar con la justicia, no distingue colores políticos. El tesorero del clan de los Casalesi, se expresaba en los siguientes términos respecto a la compra de políticos, "Generalmente a mí me daba igual quién fuera el candidato a alcalde, en el sentido de que cualquiera que ganara entraba automáticamente a formar parte del sistema gestionado por nosotros".
El método es muy antiguo, inflar los costes de una gran obra pública mediante facturas falsas para engrasar la insaciable maquinaria de la corrupción, solo cambian los actores y el escenario. En definitiva se trata del habitual, y arraigado, entramado de intereses de ida y vuelta entre políticos y empresarios corruptos, que va desde la derecha al centroizquierda de la política y del norte al sur de una gran cantidad de países.
Venecia por causa de sus políticos y empresarios corruptos se sumerge en una corrupción que, junto al paulatino desgaste de esta maravillosa ciudad, por el deterioro de los servicios y el abandono de sus edificios, consecuencia del persistente despoblamiento del centro histórico, puede terminar convirtiendo la ciudad en un parque temático para turistas.

Varias personas caminan por las calles inundadas de Venecia tras unos días de fuertes lluvias en noviembre de 2012. (Reuters)