Brasil, La discriminación racial en el mundo de las pasarelas, un reflejo de la social

Modelos protestan contra la discriminación en las pasarelas brasileñas.

El último viernes, por segunda vez en esta misma semana, la modelo brasileña Rogeria Cardeal da Silva participó en una manifestación para reivindicar la presencia de la raza negra en las pasarelas de Río de Janeiro.

Y lo hizo casi sin ropa: una diminuta tanga, sus senos pintados de varios colores y buena parte de su cuerpo en tono cobre.
"Es una sensación de libertad, de estar exponiendo lo que realmente somos", señala en una entrevista con BBC Mundo.
Unos 40 modelos negros, la mayoría mujeres, ya habían protestado mostrando los pechos, el pasado miércoles de noche en Rio de Janeiro contra la débil presencia de los negros en las pasarelas, durante el evento de la Semana de la Moda.
Un grupo de activistas negros se manifestó frente al recinto donde se celebra este acto que acoge de Río de Janeiro para exigir la presencia de modelos negras en los desfiles.
El viernes el grupo de manifestantes se concentró frente a las puertas del Jockey Club de Río, sede de la Fashion Río, antes del comienzo del primer desfile de la jornada, vestidos con ropas tradicionales africanas, portando pancartas y gritando consignas contra el racismo. 
La principal demanda del grupo es la inclusión de modelos de raza negra en todos los desfiles de las semanas de la moda de Río de Janeiro y de Sao Paulo, según un comunicado distribuido por la organización Educafro, responsable de la protesta.

Modelos desfilando en el Fashion Rio.

Brasil es el país con mayor población negra del mundo después de Nigeria. Pero aunque más de la mitad de los 200 millones de habitantes que tiene ese país sean negros, siguen siendo desfavorecidos en relación a los blancos en muchos aspectos de la vida profesional y cotidiana. Y, en el mundo de la moda, particularmente, es una realidad que los modelos llevan intentando combatir desde años atrás. Es por ese motivo que modelos negras protestaron por las calles de Río de Janeiro contra la débil presencia de los negros en las pasarelas.
"¿Qué es lo que te impresiona, tu racismo o yo?", llevaba escrito en letras blancas una de las modelos en su pecho desnudo. "Intentan presentar la moda brasileña sin los verdaderos brasileños, es una moda brasileña con modelos blancos", dijo José Flores, para la AFP, modelo que tuvo que dejar la profesión porque no encontró espacios para poder trabajar.
La manifestación coincide con la firma de una carta de compromiso entre los organizadores de la Semana de la Moda y la defensoría de Río para garantizar que al menos el 10 por ciento de las modelos en los desfiles sean negras.
Educafro señaló que hace dos años alcanzó un acuerdo con la semana de la moda de Sao Paulo para incluir una cuota de 10 por ciento de modelos negras. 
El acuerdo no ha sido renovado este año por parte de la Sao Paulo Fashion Week, lo que fue tildado por la organización como "un abuso y un atentado a la diversidad nacional". 
Para la promotora pública Larissa Davidovich, "En principio, la conducta de la organización del Fashion Week viola y afronta los tratados y normas internacionales, además de a la propia Constitución de Brasil, que busca combatir toda y cualquier forma de discriminación, inclusive la racial", según comentó para la revista brasileña Veja.

Modelo participa del acto de protesta.

La empresa organizadora de la Semana de la Moda de Río de Janeiro había firmado el martes un compromiso para recomendar a los diseñadores que incluyan el 10% de modelos negros e indígenas en sus desfiles, que comenzó el miércoles, informaron fuentes oficiales.
El acuerdo firmado es similar en sus términos al que se aplicó en Sao Paulo entre 2009 y 2012, pero que no fue renovado por Luminosidade, lo que generó protestas de asociaciones de negros.
Rogeria Cardeal da Silva sostiene que conseguir trabajo como modelo ha sido difícil debido a su raza, a pesar de que una mayoría (50,7%) de los 194 millones de brasileños son negros o mulatos.
"Es complicado porque las agencias eligen perfiles de pieles blancas, claras, rubias, ojos claros", dice. "Siempre nos dicen que no estamos en el perfil o la ropa no alcanzó para guardarnos un lugar, cuando en realidad sabemos que es debido al color de nuestra piel", añadió la modelo.
Brasil está utilizando las cuotas raciales en diferentes ámbitos buscando reducir la gran desigualdad que existe en su sociedad, donde un blanco gana en promedio casi el doble que un negro, donde la pobreza es mayoritaria entre la población negra, donde la educación es preferencialmente blanca.
"Miren a todo Brasil: ¡en el tope sólo hay blancos! No tenemos nada contra los blancos, pero que los negros tengamos una educación básica de calidad, una universidad de calidad y que consigamos competir en igualdad de condiciones", reclama Joana Raphael, coordinadora pedagógica de Educafro.
Luego de 13 años de debates, la presidenta brasileña Dilma Rousseff promulgó en agosto de 2012 una polémica ley que reserva la mitad de las plazas en universidades federales a los estudiantes de escuelas públicas y otorga prioridad a los negros, mulatos e indígenas, como acción para intentar conseguir el acceso de los mismos a los estudios universitarios.

"Si nosotros compramos ropa, ¿por qué no podemos desfilarla?", se preguntó Juliana Nalo, una modelo de 15 años que participó del evento. "O es que sólo las blancas pueden vender y nosotros comprar", denuncia para la agencia AFP.
"En 2014 queremos mucho más que eso (en referencia a la cuota del 10%). Pediremos un mínimo del 20% como nuevo punto de partida. Si el 51% de la población brasileña es negra, queremos caminar hacia la igualdad", afirmó, la coordinadora pedagógica de Educafro, Joana Raphael.