Palestina, Continúa la masacre, de niños y civiles, por parte de Israel, ante la absoluta indiferencia internacional

Aviones de combate y tanques israelíes mataron a 119 palestinos e hirieron a 500 en Gaza ayer, informaron fuentes sanitarias en la Franja, lo que convierte la jornada del miércoles en la más sangrienta de la actual ofensiva miliar israelí en el enclave.
El portavoz del Ministerio de Sanidad en Gaza, Ashraf al Qedra, especificó que los dos sucesos más graves ocurrieron cuando la artillería israelí alcanzó una escuela regentada por la ONU al norte de Gaza y un mercado en la capital de la Franja.
"Veinte personas murieron en los ataques de tanques en el colegio Abu Husein en Yabalia, y otros veinte en el mercado público de Shayaía", aclaró Al Qedra anoche, antes de agregar que "otra veintena de cuerpos fueron recogidos de entre los escombros en el sur de la Franja de Gaza".
El portavoz de la la agencia para los refugiados palestinos de la ONU en Gaza (UNRWA), Chris Gunnes, lleva días denunciando con dureza los ataques contra la población civil por parte del ejército israelí. Ayer mismo emitió un duro comunicado tras un nuevo bombardeo de una de sus escuelas en el que murieron al menos 20 personas, entre ellas varios niños, en el que acusaba directamente a Israel de sus muertes. El funcionario no ha podido reprimir las lágrimas durante una entrevista en Al Jazeera y se ha puesto a llorar desconsolado ante las cámaras. "Los derechos de los palestinos, incluso los de sus hijos, han sido negados al por mayor y eso es algo terrible", afirmó con la cara desencajada justo antes de romper en llanto. Son ya 1.361 muertos y 7.500 heridos en Gaza, el 80% de ellos civiles, según los cálculos de la ONU, desde que se inició la ofensiva israelí contra el lanzamiento de cohetes de Hamas. Nada parece indicar que vaya a haber movimientos diplomáticos para detener esta carnicería. El diálogo indirecto entre Estados Unidos, Egipto, Turquía y Qatar con Israel y Hamas no arroja nada nuevo y en los últimos días la “guerra” de treguas humanitarias entre unos y otros ha contribuido a ello. Egipto condena "los continuos ataques israelíes contra civiles inocentes en Gaza", pero no hace lo más útil que podría hacer, que es abrir su frontera y permitir la salida de refugiados. Sin embargo, para el presidente Al Sisi, Hamas es también un enemigo, ya que está vinculado a la cofradía de los Hermanos Musulmanes que él mismo sigue persiguiendo en Egipto tras el derrocamiento del presidente Mohamed Morsi.

El macabro conteo de víctimas de los bombardeos israelíes continúa en Gaza. Fueron 119 los muertos el miércoles, y en la pasada noche las fuerzas israelíes atacaron 19 objetivos. El ejército israelí señaló que entre ellos había centros de mando de Hamas. Las milicias islamistas y sus asociadas, que se mueven bajo tierra, por una extensa y sofisticada red de túneles, siguieron disparando cohetes sobre Israel. El portavoz de Hamas, Fauzi Barhum, dijo que el ataque contra un mercado, que causó 20 muertos en Shishaía ayer tarde durante un corto alto el fuego declarado unilateralmente por Israel, merece una respuesta "como un terremoto". Tras una noche menos intensa que la anterior, los F-16 israelíes siguen batiendo el cielo desde primeras horas de la mañana. Y el Gobierno israelí ha ordenado la movilización de otros 16.000 soldados reservistas para hacer un relevo de tropas. El gabinete de seguridad reunido ayer decidió seguir adelante con sus planes durante "unos días". Hoy a mediodía volverá a reunirse. Israel ha perdido 56 soldados y tres civiles han sido muertos por los proyectiles lanzados desde Gaza.

La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, denunció a Estados Unidos por proporcionar material bélico al Ejército israelí y por no hacer lo suficiente para detener la ofensiva contra Gaza. "Estados Unidos tiene influencia sobre Israel y debería hacer más para parar las muertes, para colocar a las partes en conflicto a dialogar", dijo Pillay en rueda de prensa, en la que recordó la ayuda financiera y la entrega de material bélico de Washington a Tel Aviv. "Y no sólo eso, no sólo proveen a Israel con artillería pesada usada por Israel en Gaza, sino que ha gastado casi mil millones de dólares para establecer una protección contra los cohetes para proteger a los civiles israelíes. Una protección con la que no cuentan los civiles de Gaza", concluyó. Mientras Estados Unidos y la Unión Europea mantienen silencio en la matanza de civiles palestinos o en otros conflictos, hablan de sanciones a Rusia por su política en Ucrania, mostrando una vez más su hipocresía moral, y dejando de manifiesto que los intereses económicos o geopolíticos están muy por encima del valor de miles de vidas humanas. Su negligencia en el conflicto palestino, como en otras situaciones, es tan criminal como la de aquellos que aprientan los botones que disparan las armas que asesinan centenas de civiles, o niños, de una manera indiscriminada.