Argentina, 17 meses después de ser asesinada citan a una mujer que solicitó protección judicial

La justicia argentina citó a una joven por su denuncia contra su marido por violencia doméstica más de un año después de que éste la asesinara.
Cristina Olivares tenía 27 años cuando denunció a su marido por violencia de género en la capital de San Juan, en Argentina. Su final fue trágico. Su marido, Miguel Ángel Palma, de 28 años; la amante de éste, Rosa Videla (28) y una amiga de ambos, Noelia Corvalán (20), redujeron a Olivares a punta de cuchillo y la llevaron hasta una zona rural donde la mataron de 140 puñaladas, para a continuación dejar abandonado el cadáver.
Los tres se encuentran en prisión por el crimen que cometieron el 8 de julio de 2012.

"La citamos para informarle sobre el cumplimiento de la medida pedida, porque ella había solicitado protección (contra su esposo) y nosotros notificamos que el trámite se cumplió", dijo la secretaria de la Defensoría de Pobres y Ausentes de la provincia argentina de San Juan, Natacha García, informó la agencia de noticias AFP.
"Yo no me explico cómo puede ser esto", aseguró el lunes a la prensa el padre de la víctima, Federico Olivares, quien recibió la citación el sábado para que su hija se presentara el lunes ante la justicia.
Olivares lo consideró como como "una burla" de una justicia "lenta e inoperante".
La funcionaria implicada pidió disculpas por "el error" y se explicó al decir que no estaba al tanto del asesinato de la mujer porque no había estado en la provincia durante un año.
"No ha sido con ninguna mala intención ni nada tan grave. Estamos pensando con mi jefe en cómo hacer para que esto no vuelva a suceder, porque cito por día a cuatro víctimas", dijo la secretaria del juzgado en declaraciones citadas por el diario argentino Clarín.
Su padre, Federico Olivares, contó que el policía que fue a su casa a llevar la citación "es de la misma Comisaría que investigó el crimen", por el que están en prisión Palma, Videla y Corvalán, según relata Infojus.
"Me va a disculpar por lo lento que fue el proceso", le dijo el agente policial al padre de la víctima, Federico Olivares, quien añadió que la convocaron a su hija porque "salió una resolución a favor de su denuncia por agresiones".
Olivares era madre de dos niños de 1 y 3 años cuando la encontraron con las manos atadas en la parte posterior del cuerpo y con los pantalones por debajo de las rodillas.
La resolución a favor de la protección llegó cuando María Cristina Olivares ya no la necesitaba: fue asesinada de unas 140 puñaladas el 8 de julio de 2012, y su cuerpo abandonado en un callejón.