España, El "Toro de la Vega" un Torneo primitivo y salvaje

Captura de la web de El País.

La polémica ha crecido año tras años alrededor de la "fiesta" del Toro de la Vega en Tordesillas (Valladolid) y este año la tensión ha subido un peldaño más. Declaraciones políticas a parte, la tensión se vivió ayer en las calles de este pueblo vallisoletano, cuya celebración se ha saldado con cuatro heridos por asta de toro y varios otros en los enfrentamientos entre partidarios y detractores de la celebración de este evento.
La "fiesta" del Toro de la Vega cuenta con más de 500 años de antigüedad, lo que no significa que tenga que mantenerse otros 500 años más, y consiste en matar a un toro con lanzas en el campo, una convocatoria a la que los organizadores esperan miles de asistentes y que colectivos en contra del maltrato animal rechazan con una serie de iniciativas como la reciente solicitud de ilegalización.
Antes de empezar, cerca de doscientos manifestantes, contrarios a la celebración del torneo, han tratado de impedir la salida del animal, que estaba prevista a las 11:00.
Para el inicio del recorrido, del animal sacrificado, fue necesario desalojar a un grupo de personas que se había esposado al puente del recorrido.
Un toro de 596 kilos y de nombre Elegido fue abatido, por lanzas de 40 centímetros de hoja y dos metros de mango, ayer al mediodía durante la celebración del Toro de la Vega en Tordesillas, uno de los más polémicos de los celebrados en toda su historia.
Al igual que en años anteriores se preveía que iba a haber polémica y bronca. Sin embargo, este año se han vivido momentos de tensión como nunca antes e incluso ha habido agresiones entre vecinos de Tordesillas, defensores a ultranza de lo que consideran una tradición, y activistas en favor de los animales llegados desde distintos puntos del país.
Tan es así que una defensora de los animales recibió una pedrada en la cabeza y tuvo que ser atendida por los servicios de emergencia. Ese fue el punto álgido de una jornada que empezó con una cadena humana compuesta por cerca de 200 manifestantes contrarios a la celebración que intentaron impedir la salida del animal. No lo consiguieron pero al menos los defensores de los animales lograron retrasar media hora el comienzo del festejo.
Algunos animalistas se esposaron al puente del recorrido pero agentes de la Guardia Civil, integrantes de la unidad antidisturbios, retiraron uno a uno a los activistas contrarios al torneo para intentar disolver esta concentración.

El toro salió, pero ese retraso de media hora encendió los ánimos de los defensores del Toro de la Vega: a los animalistas les empezaron a llover piedras e insultos. Al parecer, y según la versión del Ayuntamiento de Tordesillas, los defensores de los animales respondieron también con piedras. Incluso se declaró un conato de fuego junto a la ribera del Duero, suceso por el que fue detenida una persona, y del que se han acusaron tanto los animalistas como los defensores del Toro de la Vega.
Los detractores del Toro de la Vega, en su mayoría jóvenes provenientes de Madrid, Galicia y Catalunya, lanzaron proclamas como "la tortura no es cultura" y "aquí estamos, nosotros no matamos", a lo que los partidarios del Toro de la Vega respondieron con gritos contrarios a la manifestación.
Los opositores al Toro de la Vega mostraron su indignación ante la celebración de un espectáculo que consideran denigrante. "¡Es vergonzoso que alguien pueda disfrutar con el sufrimiento de un animal y que encima lo publicite, es vergonzoso!", se lamentó una de las allí concentradas, a lo que otra mujer, vecina de Tordesillas, replicó de forma airada con una invitación a marcharse: "¡Al que no le guste, que no venga y que nos deje en paz con nuestra fiesta!". 
El alcalde de Tordesillas, el socialista José Antonio González Poncela, en una primera valoración tras la conclusión de esta polémica edición, criticó la actitud de los antitaurinos y les acusó de boicotear la fiesta "expresándose a pedradas".
Pese a la tensión, al intercambio de insultos y la tensión el Toro de la Vega finalmente se celebró. Al menos cuatro personas resultaron heridas por las astas de Elegido, al parecer una de ellas de carácter grave.

El lancero a pie Álvaro Martín 'Portu' es levantado a hombros tras matar al toro 'Elegido'.  Foto: Luis Sevillano/El País.

El toro tardó media hora en llega hasta el lugar donde se le puede acometer en función del reglamento establecido, hasta que fue abatido por un lancero en torno a las 13:30 horas.
"¡Cobardes! ¡Asesinos! ¡Paletos! ¡Todos somos Elegido!" gritan de un lado. "¡Perroflautas! ¡Guarras!", le responden del otro. Los antitaurinos son más que el año pasado, reconoce el alcalde de Tordesillas, José Antonio González (PSOE). Los lanceros, en cambio, son menos. En 2013 se inscribieron 61. Ayer eran 45 (15 a caballo y 30 a pie). La polémica acorrala al Toro de la Vega.
La Comisión Europea ha rechazado este martes pronunciarse sobre el Torneo del Toro de la Vega, que se celebra en la localidad vallisoletana de Tordesillas, por considerar que se trata de una "tradición cultural" que es competencia exclusiva de los Estados miembros y no de la Unión Europea.
"La UE no tiene ninguna competencia sobre lo que es una tradición cultural en algunas partes de la UE", ha asegurado un portavoz de la Comisión Europea. 
En 1980, el popularmente conocido como Toro de la Vega fue declarado Fiesta de Interés Turístico de España por la Secretaría de Estado de Turismo, en 1999 Espectáculo Taurino Tradicional por la Junta de Castilla y León, y en 2011 Patrimonio Cultural Inmaterial por el Ayuntamiento de Tordesillas.
La controversia crece cada año. Los detractores esgrimen como argumento "la crueldad, humillación, tortura, sufrimiento e indefensión del astado, acosado por numerosos contendientes pertrechados con lanzas".  Razón no les falta.
Unos 40.000 asistentes, según fuentes municipales, presenciaron el torneo.